Es innegable que una élite capitalista controla nuestra vida y si sus decisiones nos afectan poco podemos hacer al respecto porque imponen un control legitimizado por el estado por sobre todo lo que hacemos.
Cuando votamos formamos parte de una ficción que pretende traer equilibrio al poder, pero realmente perpetúa las mismas jerarquías, esto se manifiesta en cosas tan simples como:
- Que los gobiernos aprueben leyes que nadie quiera
- Que los gobiernos protejan los intereses mediante el uso de su aparato policial en contra de los que quieran hacer algo en contra de los ricos
- Que el sistema judicial está diseñado para que entre más dinero tengas menos probabilidad de ir a prisión tienes
- Un largo etcétera
Esta pantomima de democracia se mantiene porque nos da al pueblo la ilusión de control.
Esta neta viene a cargo de Halim Alrah